Renfe y Ouigo se despiden de forma definitiva de los patinetes eléctricos a partir de este martes 12 de diciembre. A ellas también se sumará la compañía italiana Iryo, aunque sin conocerse todavía el día de su entrada en vigor en sus convoyes.
Las tres compañías ferroviarias que operan en España han prohibido subir a sus trenes con este tipo de vehículos a partir de sucesos como el acontecido el mes pasado en el metro de Madrid, entre otros. La norma, según asegura Renfe, "está basada en criterios de salud pública y de seguridad de los viajeros".
La prohibición, que se aplicará tanto en los trenes de viajeros de cercanías y regionales, como en los de larga distancia y alta velocidad, también afecta "a los monociclos o cualquier otro dispositivo de movilidad personal eléctricos o dotado de baterías", continúa la compañía ferroviaria. Aunque, añade que estarán exentos "los vehículos de personas con movilidad reducida y las bicicletas eléctricas".
De esta manera, a partir de este martes Renfe podrá obligar a aquellos viajeros que incumplan la norma a abandonar sus trenes.
Para ello en "las estaciones de cercanías gestionadas por Renfe se informará de la prohibición si se detecta a un viajero con patinete eléctrico". No obstante, la compañía advierte que igualmente se podrán hacer inspecciones aleatorias con interventores y agentes de seguridad".
BATERÍAS TRUCADAS Y PELIGROSOS INCENDIOS
Ambas compañías coinciden en las fundamentaciones que llevan a implantar esta prohibición. Por un lado, Renfe apunta a "la situación de peligro generada ante incendios de baterías", mientras que Ouigo añade que "por su composición -de las baterías-, su combustión es muy rápida y genera una gran cantidad de humo negro y tóxico que invade, en cuestión de segundos, las estancias", en este caso vagones.
Y aunque estos incidentes son poco probables, ambas empresas justifican que pueden producirse por baterías trucadas, desperfectos provocados por golpes, el uso de cargadores diferentes a los recomendados por el fabricante, o el mismo, paso del tiempo.
SEVILLA FUE LA PRIMERA EN PROHIBIRLOS
No obstante, la norma no es del todo pionera. Ni en España, ni en Europa. Tal y como recuerda Renfe, en 2021 la capital andaluza se convirtió en la primera ciudad en prohibir la entrada de patinetes eléctricos durante las horas puntas de los días laborales en el metro hispalense.
Meses después, y tras una explosión en el servicio de Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña, la región también estableció la norma que afectaba tanto al acceso a los trenes, pero también a las propias infraestructuras, como son estaciones o andenes.
A la región catalana se sumó el pasado cuatro de noviembre la madrileña. Desde entonces está prohibido el acceso de patinetes eléctricos a las instalaciones y vehículos del transporte público de la Comunidad de Madrid cuya gestión sea competencia del Consorcio Regional de Transportes.
En otros países, algunos operadores ferroviarios de Reino Unido e Irlanda, y el metro de Londres o Hamburgo, también han prohibido el acceso de patinetes eléctricos a sus trenes.
Renfe y Ouigo se despiden de forma definitiva de los patinetes eléctricos desde este 12 de diciembre. A ellas también se sumará la próximamente la compañía italiana Iryo.
Las compañías se suman a las prohibiciones que ya existen en Sevilla o Madrid ante las posibles explosiones que pueden provocar estos vehículos.
La norma, según asegura Renfe, "está basada en criterios de salud pública y de seguridad de los viajeros".
La prohibición, que se aplicará tanto en los trenes de viajeros de cercanías y regionales, como en los de larga distancia y alta velocidad, también afecta "a los monociclos o cualquier otro dispositivo de movilidad personal eléctricos o dotado de baterías", continúa la compañía ferroviaria. Estarán exentos "los vehículos de personas con movilidad reducida y las bicicletas eléctricas".
FUENTE: www.elmundo.es
