Un camión cargado de ladrillos cayó al canal principal de riego que atraviesa la ciudad de Allen. Su conductor pudo salir por sus propios medios y de milagro no murió ahogado, dado que en esta época el cauce fluye cargado de agua.
Le realizaron el examen de alcoholemia, que arrojó que había consumidos bebidas alcohólicas. Además hubo que desplegar un intenso operativo con máquinas viales para poder retirarlo el vehículo.
El incidente se registró en proximidades del edificio de la ex bodega Millacó, ubicado en la calle Miguel Sorondo y Amilcar Regot.
El presunto estado de ebriedad del camionero trascendió inmediatamente por comentarios de vecinos. La versión se confirmó luego cuando lo sometieron a la prueba, que arrojó que tenía 1,81 g/l sangre, informó el comisario Italo Freydoz a El Diario de Allen.
Fue compleja la maniobra para retirar el camión del canal. Requirió de la labor conjunto entre el miembros Bomberos Voluntarios, Defensa Civil y empleados municipales.
Debieron quitar parte de la carga de ladrillos para quitarle peso, aunque demandó el uso de tres máquinas y varios intentos hasta que lograron extraerlo.
Freydoz precisó a FM TERAPIA, que el hombre es nacionalidad boliviana y tiene domicilio en Mainqué. Estuvo demorado en la comisaría sexta hasta esta mañana del sábado.
En las redes sociales de inmediato y una vez conocida la noticia se resaltó que el conductor por su estado de ebriedad pudo haber provocado una tragedia por el porte del vehículo que manejaba. Había coincidencia en cuanto a imponerle un castigo ejemplificador. (La Mañana de Neuquén)