La Justicia de Reino Unido ha confirmado una indemnización de 39 millones de libras esterlinas (44,4 millones de euros) para una niña a la que le amputaron brazos y piernas por una negligencia médica. Según sus abogados, la niña acudió al Hospital Frimley Park con síntomas de meningitis, pero la mandaron para casa con un tratamiento de paracetamol, como así afirmó la BBC.
Después de la primera exploración por la cual se marchó a casa, horas más tarde volvió a ingresar en urgencias con una sepsis meningocócica que le provocó un fallo multiorgánico. Como consecuencia, los médicos le tuvieron que amputar ambos brazos por encima del codo y ambas piernas por encima de las rodillas.
Posteriormente la familia presentó una demanda en la que argumentaba la negligencia. Sus familiares afirmaron que si desde el primer momento se hubiera tratado la negligencia mediante antibióticos -y no mediante paracetamol-, se podrían haber evitar los amputaciones.
Asimismo, Elizabeth-Anne Gumbel KC, representante de la familia de la pequeña apoyó la versión de los padres. Aseguró que la joven no habría perdido las extremidades de haber sido diagnosticada correctamente de una forma más rápida. La representante de la unidad familiar también añadió que "no hay cantidad de dinero que realmente pueda compensarla por sus lesiones".
El hospital admite la culpa
Por su parte, Neil Nardi, director ejecutivo de Frimley Health NHS Foundation Trust, se disculpó mediante una carta. Mediante este escrito dirigido al tribunal y a los padres de la pequeña, afirmó que su atención "cayó por debajo del estándar que (la niña) tenía derecho a esperar".
Tras el acuerdo la niña podrá acceder a la indemnización mediante un primer pago, y posteriormente a través de pagos anuales durante el resto de su vida. "Nos complace que se haya aprobado el acuerdo y esperamos que los daños acordados aseguren que la demandante pueda vivir de la manera más independiente posible en el futuro", confirmaron desde el hospital.
(Fuente: 20 Minutos)