El 10 de Junio es el Día Nacional de la Seguridad Vial.
No es un Día de “conmemoración” o sea el “recuerdo de un acontecimiento histórico o de una persona destacada mediante la celebración de un acto solemne o fiesta, especialmente en la fecha en que se cumple algún aniversario”, concepto que en todo caso podría corresponder al día en que cambió la mano de circulación de izquierda a derecha (aunque ya no sería de la “Seguridad Vial”).
No es un Día festivo…no hay nada que festejar.
Tampoco es un Día de un tema exclusivo y excluyente.
La Seguridad Vial no es tema de un día.
Ni siquiera es un día de “reflexión”: pensemos HOY en Seguridad Vial…
A nuestro criterio es un día de “balance”, de “rendir cuentas”: que hicimos mal, que podemos mejorar NOSOTROS mismos, que deberíamos exigir que mejoren quienes han sido elegidos para hacerlo.
¿Qué podemos mejorar NOSOTROS mismos como integrantes de una sociedad que “comparte” la vía pública, para empáticamente hacerla más segura?
¿Qué podemos mejorar desde las EMPRESAS Y ORGANIZACIONES para “gestionar” adecuadamente la Seguridad Vial en sus actividades?
¿Qué políticas públicas activas en la materia podemos y debemos exigir a quienes fueron designados para gestionar desde el Estado (municipal, provincial y nacional) la Seguridad Vial para minimizar la principal causa NO natural de muerte y lesión de la sociedad?
Dr. Eduardo Bertotti
Director ISEV
