Durante el martes a la tarde en la localidad bonaerense de San Miguel, una casa explotó y quedó totalmente destruida por el mal accionar de unos obreros en una zona cercana que pincharon una tubería de gas. El personal era de la firma UT Tecma-Alfa-Vial, contratada por Aysa para hacer arreglos en la intersección de las calles Urquiza y Belgrano.
German, un joven vecino de la zona, contó que “cerca de las 15 en mi familia dijeron que sentían mucho olor a gas”, y agregó que inclusive en su trabajo, que se encuentra en inmediaciones, tuvieron que salir temprano a causa del olor.
A pesar de los llamados a la Policía, los vecinos no fueron evacuados, sino que salieron de sus hogares por propia iniciativa. “Mi familia salió por su cuenta porque había mucho olor a gas y no se podía estar”, precisó y aseguró que sus papás llamaron a la policía, pero que en ese momento los trabajadores de la obra “agarraron sus cosas, dejaron todo como estaba y se fueron”.
Germán remarcó que tras el llamado al 911, personal policial se acercó al lugar junto a Defensa Civil y sellaron la zona. “Por la cantidad de olor que salía, media hora después explotó”, detalló.
Cuando ocurrió la explosión la casa estaba vacía porque la mujer que vive allí se encontraba de viaje. Aun así, su vivienda quedó completamente destruida ya que al estar completamente cerrada no tenía lugar para ventilar el gas.
El joven explicó que en su vivienda también sufrieron las consecuencias de la explosión pero que no hubo grandes daños. Tras el suceso, debieron permanecer siete horas en la calle. “Recién a las 11 de la noche nos dejaron entrar porque estaban viendo si seguía el gas o no”. detalló.
La situación no llegó a mayores porque el resto de las casa de la zona estaban habitadas y pudieron ventilar o auto-evacuarse a tiempo. En el lugar se hicieron presentes también agentes de la Policía, de los Bomberos y de las empresas Edenor, Gas Natural y AySA, que aseguraron la zona y cortaron los suministros para evitar más accidentes.
(Diario Popular)