Condena penal por mordedura fatal en Corrientes

Las noticias sobre ataques de perros de razas peligrosas a niños y adultos es algo que se repite casi todos los meses en alguna provincia.



Las noticias sobre ataques de perros de razas peligrosas a niños y adultos es algo que se repite casi todos los meses en alguna provincia. Sin embargo, son pocos los casos en los que el dueño del animal termina tras las rejas, como en este caso ocurrido hace casi dos años.

En las últimas horas, se conoció que un hombre fue condenado a ocho años de cárcel porque su pitbull mató a una niña de 10 años. Fue luego de que el juez avalase el acuerdo entre el defensor del dueño del animal y la fiscal del caso. De esta manera, el propietario de la mascota irá a prisión en un corto plazo.

El hombre en cuestión fue identificado como Fabián Rafael Ledesma, dueño del perro de raza peligrosa, que mató chica de 10 años, a la que atacó el 23 de septiembre de 2022 en el barrio Esperanza, en la ciudad de Paso de los Libres, en Corrientes.

Ese día el perro mordió salvajemente a la niña y solo dejó de atacar cuando el hombre trató de evitarlo, pero no llegó a tiempo y el animal ya la había matado. Según publicaron medios locales, no era la primera vez que el animal atacaba. El perro ya había protagonizado al menos tres ataques anteriores, aunque ninguno había sido denunciado penalmente y las víctimas habían sobrevivido.

Daniela Di Tomaso, la fiscal a cargo del caso, fue quien buscó la información entre los vecinos, quienes le informaron que habían advertido en diversas oportunidades sobre la peligrosidad del perro, que ya había atacado a varios niños anteriormente.

El juez de Garantías Gabriel Aldaz homologó durante el desarrollo del caso el acuerdo alcanzado por Di Tomaso y el defensor oficial Facundo Sotelo. Allí se concluyó que Ledesma no actuó, no previó la posibilidad de un ataque mortal dada la agresividad del perro.

En tanto, los padres de la víctima dieron su aval al acuerdo. Con todas las partes informadas, Ledesma fue trasladado a la unidad penal local, para quedar a disposición del Juzgado de Ejecución de Penas, Medidas de Seguridad y Cautelares.  (Con información de La Nación)