En los últimos 18 días, el muro de la cuenta en Facebook de Javier Pérez cambió las fotos de sus viajes y encuentros con sus seres queridos por súplicas al cielo y reportes médicos. Su novia, Victoria Irusta, se encontraba en grave estado tras caerse de su bicicleta por intentar esquivar una pelota. El lunes la placa que eligió el hombre para subir a la red social lleva un fondo negro. Publicó lo que nunca hubiese querido informar: murió la mujer de 34 años.
Todo sucedió el 21 de enero cerca de las 21.30 en Villa María, Córdoba, de donde era oriunda Victoria. Ella estaba circulando en bicicleta por la calle Espora al 300, a unos dos kilómetros de la terminal de la ciudad. En ese mismo lugar había un grupo de niños jugando al fútbol y, justo cuando la joven pasaba por allí, se les escapó la pelota.
Según informó Eldoce.tv, todavía no está claro si la pelota impactó contra una de las ruedas o si Victoria hizo alguna maniobra para intentar esquivarla. Lo cierto es que perdió el control de la bicicleta, cayó y golpeó la cabeza contra el asfalto.
Inmediatamente fue trasladada al hospital regional Pasteur de Villa María y los médicos le diagnosticaron un hematoma subdural y traumatismo de cráneo. Desde un primer momento le informaron a su familia que su estado era crítico. Fue intervenida quirúrgicamente de urgencia y quedó internada en la sala de terapia intensiva, en coma, luchando por su vida.
Javier Pérez, su pareja, había subido tres días antes las fotos que sacó junto a ella durante las vacaciones que compartieron en las sierras cordobesas. A partir del fatal 21 de enero, empezó a publicar reportes sobre la salud de Victoria y pedidos de oración por ella.
“Dios no me abandones y escucha mis súplicas. Te lo ruego”, fue el primer mensaje que publicó. Un rato más tardes les contó a sus amigos en la red social qué fue lo que había sucedido: “Victoria sufrió una fuerte caída en bicicleta, golpeando su cabeza en la acera, debido a una pelota de fútbol que se le atravesó en la calle (donde unos niños jugaban). Esto produjo un importante hematoma en su cabeza, debiendo ser intervenida de urgencia. Hoy se encuentra en terapia intensiva, entubada y esperando qué evolución tiene. Solicito fuerte cadena de oración para su salvación. Es lo que queda luego de su atención médica. Gracias a la cantidad de mensajes que he recibido. Sus afectos dan más fuerza. ¡Ella tiene que salir adelante!”
Según la información que aportó Javier en Facebook, la situación mejoró un poco al día siguiente, ya que “le quitaron algunos medicamentos”. Además, el 24 de enero publicó: “A Victoria le están haciendo pruebas con el respirador hasta llegar a que respire sola. Y está luchando para despertar. Les pido y les agradezco por las oraciones. El Señor tiene que hacer el milagro de su pronta recuperación. No dejemos de pedirle a Dios por ella”.
Las buenas noticias parecían asomar el 27 de enero, cuando publicó: “Victoria intenta abrir sus ojos. Tuvo algunos movimientos en uno de sus brazos. Hay que seguir orando y que Dios haga la obra necesaria. No dejemos de orar, así la luz se enciende”.
El 31 de enero informó que le realizaron una traqueotomía, que no presentó complicaciones, y el 2 de febrero contó: “Tiene su respirador en piloto. Ella está manteniendo su respiración por ella. Sigamos orando para que despierte”.
Unos días después, el 5 de febrero, el estado de Victoria se complicó con la aparición de un cuadro febril y tuvo que volver a ser asistida con respirador artificial.
En la madrugada del lunes Javier publicó con un cartel negro que su pareja había fallecido. “El cielo está gris con tu partida”, posteó. Su muro en la red social se llenó de comentarios de sus amigos virtuales y seres queridos, quienes le dejaron sus condolencias y destacaron la generosidad y la nobleza que distinguieron a Victoria durante su vida.
(Fuente : Infobae)