Una mujer junto a sus hijos llevan tres días viviendo en la casa de una vecina en el partido bonaerense de Lomas de Zamora luego de que este fin de semana un auto impactara contra la casilla en la que vivían y terminara incrustado dentro del comedor de la vivienda, ubicada en la localidad de Temperley, donde sigue metido desde hace dos días.
El accidente ocurrió el sábado por la mañana, cuando un Volkswagen Gol color gris plata en el que viajaban dos jóvenes chocó contra otro auto en el cruce de las calle Picaflor y Bynnon, en el barrio San José, justo en el límite con la localidad de Rafael Calzada. Según relataron los vecinos, el auto que era conducido por un joven de entre 23 y 24 años junto a un acompañante chocó contra otro vehículo, perdió el control e impactó de lleno contra la pared de una casa, que atravesó.
Por diferencia de apenas unos segundos, el accidente podría haber sido una tragedia. “Había tres chicos que estaban sentados en un tronquito que había ahí, donde se sientan todas las mañanas a jugar. Cuando chocó el auto hacía un minuto que se habían levantado y se habían ido a la casa de su abuela”, contó Susana, la vecina del barrio que recibió en su propia casa a los habitantes de la casilla que quedó destrozada, en diálogo con Crónica. “Rompieron todo, la heladera, la cocina, un trompo que había acá para mezclar cemento, todo”, detalló.
De acuerdo al testimonio de la mujer, los dos amigos que chocaron su auto contra la casa de su vecina junto a otros amigos que circulaban en otro auto y frenaron para asistirlos comentaron que en ese momento volvían de una fiesta en la localidad de Burzaco. “Cuando salieron del auto vinieron los otros amigos a sacar las botellas y una jarra que tenían adentro del auto”, contó Susana.
La mujer denunció que tras el accidente los jóvenes –a quienes les prestaron un cuello ortopédico tras el accidente– se fueron y no volvieron a retirarlo el sábado, cuando les dijeron que el vehículo no tenía seguro y que ellos no tenían dinero para costear los arreglos de la casa, que quedó completamente abierta con sus pertenencias dentro de la casa entre cables sueltos y electrodomésticos y muebles rotos.
“Mi vecina es una chica de trabajo que trabaja en la feria y no tiene cómo arreglar esto. No quedamos electrocutados los que vinimos a ayudar a los chicos que estaban adentro del auto porque el cable de la luz también lo cortó y quedó roto arriba de la chapa”, agregó la mujer que los recibió por el momento en su casa, ya que no tienen dónde dormir. “Somos todos humildes, no tenemos para comprar materiales, vivimos del día a día”, concluyó, y pidió colaboración y solidaridad de los vecinos para poder reconstruir la casa.
(Fuente: Infobae)