Una mujer que sufrió graves secuelas después de una intervención quirúrgica para una reducción mamaria será indemnizada por el cirujano y la empresa de medicina prepaga involucrados en el procedimiento.
El procedimiento, aprobado por la prepaga OSDE y realizado en el Sanatorio Las Lomas de Buenos Aires, no consideró una enfermedad preexistente de la paciente, un trastorno de la coagulación llamado Von Willebrand. Este descuido causó sangrado intraoperatorio, hematomas y, con el tiempo, la formación de granulomas, afectando de manera irreversible tanto la salud como la estética de la mujer.
Tras la intervención, la paciente presentó asimetría en sus mamas, infecciones severas en las areolas y endurecimientos dolorosos en el tejido mamario. A pesar de sus constantes consultas al cirujano, este minimizó los síntomas, no ordenó estudios complementarios ni brindó un tratamiento adecuado. La situación llevó a la paciente a someterse a una segunda cirugía que no logró reparar los daños de manera total.
Un juez civil de Bariloche determinó que el cirujano incurrió en omisiones graves, como la falta de un consentimiento informado adecuado y la ausencia de registros completos en la historia clínica. Además, se señaló que la paciente no tuvo la libertad plena para elegir un cirujano fuera de la cartilla de la prepaga, lo que incrementó la responsabilidad de OSDE en la deficiente atención.
En consecuencia, el juez ordenó una indemnización de $19.133.120 por daño patrimonial, psicológico y moral.
